Otro cuento chino.
Resulta que ahora el Ministerio de Igualdad se va a dedicar a prohibir que sean leídos ciertos cuentos declarados sexistas, como Cenicienta, Blancanieves, o en definitiva todo aquel en el que el protagonista sea un hombre que tenga que hacer algo por salvar a la mujer estando ésta en una actitud pasiva.
Como estosololoarreglamosentretodos, voy a colaborar en el asunto y por ello propongo darle un giro al cuento de Cenicienta. Por ejemplo el príncipe en una noche loca podría dejar embarazada a Cenicienta aprovechando que ésta se encuentra totalmente ebria por el alcohol, comprado eso sí por el príncipe porque ella no puede, al ser menor de edad, sólo tiene 16 años.
Ante tal situación la joven, un día de elecciones aprovecha, puesto que no puede votar por no alcanzar la mayoría de edad, para acudir a una farmacia a comprar la píldora abortiva sin contarle nada nunca a sus padres pues ella es independiente y toda una mujer….
A ver si he entendido bien el asunto, ahora tenemos que intentar evitar que los pequeños lean este tipo de cuentos porque ejercen una mala influencia en ellos, pero sí pueden ver las múltiples series juveniles que proliferan en nuestras cadenas de televisión en las que vale todo, se puede hablar de drogas, embarazos no deseados, romances de menores de edad con profesores…, por no hablar de la violencia en las películas o de la telebasura emitida en cualquier horario.
Claro que a la ministra del famoso: Miembros y miembras no se le podía ocurrir otra cosa sino ésta, porque “la cerebra de esta ocupanta de una escaña no está para otras pensamientas”.
No os podéis ni imaginar lo que me enerva el tema del lenguaje no sexista y políticamente correcto, yo creo que se trata de una absurda moda. Imaginaos una carta de la Asociación de Padres ¿y madres? de un colegio: “Distinguidos/as padres/madres: Estamos complacidos/as en convocar la reunión para hablar juntos/as de nuestros/as hijos/as…” Leer y escuchar esto es insoportable, pero desgraciadamente está a la orden del día.
Precisamente para ahorrarnos estos farragosos y empalagosos textos surgió la utilización de la maldita arroba y por qué no, para darle a nuestros textos un toque más chic y moderno. ¿Pero @ es una letra realmente? No, si al final la terminaremos acuñando como letra de nuestro alfabeto…
Para aportar un poco de cordura a todo esto señalaré textualmente un párrafo que aparece en el excelente artículo "La utilización del lenguaje para cambiar la realidad": "El masculino genérico ha perdurado y perdurará porque responde al principio de economía lingüística, que impele a los humanos a tratar de lograr la máxima comunicación con el mínimo esfuerzo. Vulnerar este principio nos conduciría, como advierte con sorna el escritor Javier Marías, a convertir la frase “el perro es el mejor amigo del hombre” en un circunloquio extravagante y ridículo: “La perra y el perro son la y el mejor amiga y amigo de la mujer y el hombre”".
Por no hablar de la doble moral que existe en estos tiempos. Sin ir más lejos sólo hay que echar un vistazo por encima al escándalo que se montó en Murcia con una imagen de Mariana de Austria desnuda, colocada en la parte de atrás de los autobuses urbanos de la ciudad por unos días, con motivo del Proyecto de Arte Contemporáneo (PAC).
La izquierda más izquierda de todas las posibles en este país (Izquierda Unida) lo consideró: "sexista, inapropiado y sacado de contexto" y ha pedido "el cese inmediato" del consejero Pedro Alberto Cruz.
Pero, ¿qué es lo que tiene esta moda que hasta los partidos reniegan de su propia ideología?
¿En pleno siglo XXI un partido progresista y liberal se va a escandalizar por un desnudo?, entonces ¿qué hacemos luchando para que por ejemplo no cierren playas nudistas? ¿o simplemente hay que sacar tajada de lo que sea y como sea?. Esto se lo cuentas a D. Santiago Carrillo hace tres décadas y se cae de espaldas. El mundo al revés, un partido de izquierdas pidiendo la dimisión de un consejero de un gobierno regional de derechas, por exponer públicamente una obra de arte escandalosa.
¿En serio que creemos que es denigrante esta imagen para la mujer? Recuerdo que la obra ha sido realizada por una MUJER (Carmen Molina Cantabella)
Antes de que dejen de leer esta entrada las feministas, yo preguntaría ¿se consideraría igual de sexista e incorrecto si la imagen del autobús hubiera sido la de Felipe IV?...
Para finalizar os dejo el cuento de caperucita, convenientemente redactado empleando un lenguaje políticamente correcto, que he encontrado por la red: (Fuente: www.1de3.com)
EL CUENTO DE CAPERUCITA ROJA EN LENGUAJE POLÍTICAMENTE CORRECTO PARA NIÑOS/AS POLÍTICAMENTE CORRECTOS/AS
Érase una vez una persona de corta edad llamada Caperucita Roja que vivía con su madre en la linde de un bosque. Un día, su madre le pidió que llevase una cesta con fruta fresca y agua mineral a casa de su abuela, pero no porque lo considerara una labor propia de mujeres, atención, sino porque ello representaba un acto generoso que contribuía a afianzar la sensación de comunidad. Además, su abuela no estaba enferma; antes bien, gozaba de completa salud física y mental y era perfectamente capaz de cuidar de sí misma como persona adulta y madura que era.
Así, Caperucita Roja cogió su cesta y emprendió el camino a través del bosque. Muchas personas creían que el bosque era un lugar siniestro y peligroso, por lo que jamás se aventuraban en él. Caperucita Roja, por el contrario, poseía la suficiente confianza en su incipiente sexualidad como para evitar verse intimidada por una imaginería tan obviamente freudiana. De camino a casa de su abuela, Caperucita Roja se vio abordada por un lobo que le preguntó qué llevaba en la cesta.
Un saludable tentempié para mi abuela quien, sin duda alguna, es perfectamente capaz de cuidar de sí misma como persona adulta y madura que es -respondió.
- No sé si sabes, querida -dijo el lobo-, que es peligroso para una niña pequeña recorrer sola estos bosques.
Respondió Caperucita: Encuentro esa observación sexista y en extremo insultante, pero haré caso omiso de ella debido a tu tradicional condición de proscrito social y a la perspectiva existencial -en tu caso propia y globalmente válida- que la angustia que tal condición te produce te ha llevado a desarrollar. Y ahora, si me perdonas, debo continuar mi camino.
Caperucita Roja enfiló nuevamente el sendero. Pero el lobo, liberado por su condición de segregado social de esa esclava dependencia del pensamiento lineal tan propia de Occidente, conocía una ruta más rápida para llegar a casa de la abuela. Tras irrumpir bruscamente en ella, devoró a la anciana, adoptando con ello una línea de conducta completamente válida para cualquier carnívoro.
A continuación, inmune a las rígidas nociones tradicionales de lo masculino y lo femenino, se puso el camisón de la abuela y se acurrucó en el lecho.
Caperucita Roja entró en la cabaña y dijo: Abuela, te he traído algunas chucherías bajas en calorías y en sodio en reconocimiento a tu papel de sabia y generosa matriarca.
Acércate más, criatura, para que pueda verte -dijo suavemente el lobo desde el lecho.
¡Oh! -repuso Caperucita-. Había olvidado que visualmente eres tan limitada como un topo. Pero, abuela, ¡qué ojos tan grandes tienes!
- Han visto mucho y han perdonado mucho, querida.
- Y, abuela, ¡qué nariz tan grande tienes!… relativamente hablando, claro está, y a su modo indudablemente atractiva.
- Ha olido mucho y ha perdonado mucho, querida.
- Y… abuela, ¡qué dientes tan grandes tienes!
Respondió el lobo: - Soy feliz de ser quien soy y lo que soy -y, saltando de la cama, aferró a Caperucita Roja con sus garras, dispuesto a devorarla.
Caperucita gritó; no como resultado de la aparente tendencia del lobo hacia el travestismo, sino por la deliberada invasión que había realizado de su espacio personal.
Sus gritos llegaron a oídos de un operario de la industria maderera (o técnico en combustibles vegetales, como él mismo prefería considerarse) que pasaba por allí. Al entrar en la cabaña, advirtió el revuelo y trató de intervenir. Pero apenas había alzado su hacha cuando tanto el lobo como Caperucita Roja se detuvieron simultáneamente.
- ¿Puede saberse con exactitud qué cree usted que está haciendo? -inquirió Caperucita.
El operario maderero parpadeó e intentó responder, pero las palabras no acudían a sus labios.
- ¿Se cree acaso que puede irrumpir aquí como un Neandertalense cualquiera y delegar su capacidad de reflexión en el arma que lleva consigo? -prosiguió Caperucita-. ¡Sexista! ¡Racista! ¿Cómo se atreve a dar por hecho que las mujeres y los lobos no son capaces de resolver sus propias diferencias sin la ayuda de un hombre?
Al oír el apasionado discurso de Caperucita, la abuela saltó de la panza del lobo, arrebató el hacha al operario maderero y le cortó la cabeza.
Concluida la odisea, Caperucita, la abuela y el lobo creyeron experimentar cierta afinidad en sus objetivos, decidieron instaurar una forma alternativa de comunidad basada en la cooperación y el respeto mutuos y, juntos, vivieron felices en los bosques para siempre.
Genial la entrada, me ha encantado como analizas de un modo divertido esta situación que vivimos con nuestro lenguaje. Me quedo el cuento para contárselo a mis alumnos y alumnas en el día del libro, jeje. Un beso
ResponderEliminarEl nombre del blog no podría estar mejor pensado jajaja. Un saludo, nunca me había dado por buscar mi blog y de pura casualidad he dado con el tuyo.
ResponderEliminarMucha suerte y un saludo.
Y si todo son artimañas para undir a disney? Pensad que todos los cuentos infantiles creados antes de la segunda guerra mundial son sexista, por no extenderlo practicamente al siglo 21. Los niños siguen jugando con coches y las niñas con princesas o accesorios varios de ama de casa. Prohibamos tambien los juguetes! Terminemos con Disney! Quememos todos los cuentos o libros que puedan ser sexistas!... Lo que avanzara el mundo cuando todos seamos hermafroditas y no tengamos estas peleas...jejeje. Y aun asi las tendremos... ¿Sabeis que en japon ya han planteado una ley segun la cual no pueden salir imagenes en el manga de ningun cuerpo desnudo o semidesnudo (en bañador o en ropa escolar japonesa) y que esto se considerara pornografico y por lo tanto no podra estar donde el resto de comics? ¿o que en EEUU las mayores firmas de comics tienen un Comic Code que impide que salga escenas subidas de tono en los comics pero que no impide que aparezcan muertes brutales? El mundo va mal...
ResponderEliminarPD: como has escrito una entrada larga, tengo que hacer un comentario largo...jejejeje. Nos vemos el viernes