El Balón de Oro lo ha conquistado Messi, objetivamente con todo merecimiento, ya que hoy por hoy es indiscutible que se trata del mejor jugador que existe en el mundo, y el premio al mejor entrenador ha recaído en José Mourinho al que nadie le puede negar su valía como entrenador y más después de los enormes éxitos conseguidos el año que recientemente hemos abandonado.
Aunque para mí este resultado ha constituido emocionalmente una gran decepción. Mi apuesta, como la de otros muchos, era por la pareja Iniesta-Del Bosque. Puede que fuera una apuesta más sentimental que reflexiva, un anhelo más que una convicción.
Aunque para mí este resultado ha constituido emocionalmente una gran decepción. Mi apuesta, como la de otros muchos, era por la pareja Iniesta-Del Bosque. Puede que fuera una apuesta más sentimental que reflexiva, un anhelo más que una convicción.
A mi juicio el binomio Iniesta-Del Bosque mereció mejor suerte a parte de por sus cuantiosos méritos deportivos, por representar una serie de valores importantísimos y verdaderamente necesarios para un fenómeno social de tal magnitud y repercusión a todos los niveles como es el fútbol. Ambos se han convertido en estandartes de el buen hacer y de la consecución de objetivos por medio de esos valores en los que se debería sustentar cualquier comportamiento humano: la humildad, la sencillez, la modestia y la nobleza frente a los aspavientos, la arrogancia, la altanería, el egocentrismo y la frivolidad que inundan en la actualidad nuestro deporte rey y la sociedad en general.
Y qué decir de Iniesta, el hombre tranquilo, el vecino de al lado, la persona que tras marcar el gol más importante en la historia del fútbol español y convertir el sueño de millones de personas en realidad, justo en los instantes más importantes de su vida, se acuerda de su amigo Jarque fallecido unas fechas atrás...
Así es este deporte, en el fútbol, como en la vida y al contrario que en las películas, no siempre ganan los "buenos".
Después de todas estas reflexiones me quedo con el consuelo de que al menos no se ha llevado el Balón de Oro Cristiano Ronaldo y con la pena de que Messi no sea español...
Después de todas estas reflexiones me quedo con el consuelo de que al menos no se ha llevado el Balón de Oro Cristiano Ronaldo y con la pena de que Messi no sea español...
En el caso del balon de oro, este año era imposible que ganara uno malo... Aunque me hubiese gustado mas que lo ganara Xavi, que también se lo merecía...
ResponderEliminarClaro, si a Messi no se le puede reprochar nada pues es el mejor jugador del mundo, pero en este caso nos quedamos con la espinita clavada (como muchas otras veces).
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